1. Porque crea expectación en los festivales
El Sónar ha sido el último festival en el que se han podido ver a las grandes estrellas del trap. Hasta el diario El País, a través de Manuel Jabois, hablaba sobre este movimiento hace tan solo unos días. La catalana Bad Gyal, el granadino Yung Beef o Pimp Flaco formaron parte del cartel de este festival y algunos de ellos estarán próximamente en otras citas del calendario festivalero como el FIB o el Arenal.
2. Por personajes como Cecilio G
Cecilio G es uno de esos traperos inclasificables. Cercano en ocasiones al punk, es otra muestra del eclecticismo que mueve a todo este mundillo, capaz de aunar a varios géneros musicales generalmente antitéticos. Además, sus canciones están llenas de críticas a otros cantantes y traperos lo cual le añade más morbo al asunto y es algo que le ha generado no pocos enfrentamientos. Ah, sin olvidarnos de que en 'Gucci Shanna' rescató el 'Suavemente' de Elvis Crespo y que en uno de sus últimos singles habla de Antonio Alcántara.
3. Porque es la expresión de una juventud con pocos recursos
"El trap no es solo música para bailar a lo muy putilla". Esta es una frase típica que genera debate entre los seguidores y detractores del trap. Y la cita suele dar en el clavo. Al fin y al cabo, el trap es la manera de expresarse de una parte de la juventud que ha crecido con unas condiciones económicas no muy boyantes y que ante la falta de expectativas deciden recurrir al hedonismo mientras crean música.
Las letras de un cantante de trap suelen estar llenas de referencias al sexo, las drogas y la prostitución y eso no tiene por qué ser malo porque en ocasiones es lo que ellos mismos han vivido. Con el trap mejor dejar los prejuicios a un lado. Además, una de las ventajas del trap es que no es necesario tener una gran voz -democratiza la música- ya que eso lo puede solventar el autotune que, aviso a marineros, no era solamente cosa de Cher y que a la larga puede llegar a engancharte.
4. Por la importancia de las mujeres en este género
Aunque ni Bad Gyal, más próxima al dancehall, ni Ms Nina, que hace reggaeton, se consideran cantantes trap sí se encuentran dentro de esta escena urbana -etiquetada por los periodistas- que se ha desarrollado en España durante estos últimos años. Ms Nina ha llegado a reconocerse como feminista y Bad Gyal ha hablado en muchas ocasiones del empoderamiento de la mujer. Sus discursos van en consonancia con la idea de igualdad de género y en ambientes que siempre han sido poblados por hombres con actitudes machistas, la presencia de perfiles como ellas son muy necesarios. Además, sus canciones son muy pegadizas y atrevidas. Si las escuchas te vas a divertir, te lo aseguro.
Me gusta el blog que has hecho Nacho, ademas de que te habrá llevado mucho tiempo, ya que tienes bastantes entradas.
ResponderEliminarGracias tio, se intenta hacer lo mejor posible jajajaj
ResponderEliminar